Críticas

«Este libro, proeza de un experto que manifiestamente conoce bien su campo, es una obra singular que nos hace recapacitar sobre lo que comprendemos por “democracia” y la manera en que debiéramos considerar sus nuevas manifestaciones en el “tercer mundo”».

— Antoni Kapcia, Profesor de historia latinoamericana, especialista en estudios sobre Cuba, University of Nottingham, U.K. Campus

«Arnold August abre una zanja en el asunto de la usual propaganda sobre la democracia en los Estados Unidos y la supuesta falta de democracia en Cuba. Si bien el trabajo anterior de August sobre el sistema político cubano abría una ventana a esta isla prohibida, Cuba y sus vecinos aumenta nuestra comprensión sobre los procesos participativos que han cobrado forma en el transcurso de la historia revolucionaria de Cuba.»

— Cliff DuRand, Profesor emérito de Filosofía social en Morgan State University, (Baltimore, Estado de Maryland) Estados Unidos

«El reciente libro de August examina los órganos de gobierno de Cuba incluidos el sistema electoral y la función específica del aparato de Estado entre períodos electorales. Amplía considerablemente su previo y sumamente útil análisis de las elecciones en Cuba en la segunda mitad de la década de los noventa. Este libro proporciona una herramienta muy necesaria para la evaluación exacta del excepcional sistema de participación y representación política de Cuba, a través de pruebas empíricas y no mediante las habituales interpretaciones derivadas. Se trata de una obra esencial para toda persona seriamente interesada en Cuba y en la cuestión global de la democracia y sus prácticas.»

— Claudia Kaiser-Lenoir, Profesor emérita de Estudios latinoamericanos de Tufts University, (Medford, Estado de Massachusetts) Estados Unidos

«Acercamiento pionero al estudio y descripción de la democracia en Cuba desprendido del seno mismo del sistema, mediante el cual la práctica de la democracia cubana es comparada con experiencias del entorno. El concepto de “democracia en movimiento” parte del análisis de un movimiento creativo y demuestra que Cuba es un laboratorio social. En Cuba, al igual que en otros países de América Latina, la democracia participativa está cobrando forma. Arnold August contrasta estas experiencias con los pretextos del modelo democrático estadounidense. La lectura de este libro es obligatoria para comprender a Cuba y romper con la supuesta supremacía del pensamiento unidimensional.»

— Claude Morin, Profesor honorario, Latinoamericanista, Université de Montréal, (Provincia de Quebec) Canadá